Los monitores curvos tienen un aspecto magnífico, pero ¿son realmente mejores que un monitor plano normal? Así que, monitores curvos frente a monitores planos para juegos, veamos qué ofrece cada estilo.
La principal ventaja de un monitor curvo es la inmersión. Al utilizar un monitor curvo, sobre todo si es uno con relación de aspecto 21:9 (Ultrawide), en lugar de uno 16:9 (Wide), notarás rápidamente que la curvatura de la pantalla te dará la impresión de que las imágenes te rodean y, por tanto, te situará más en el juego de lo que lo haría con un panel de monitor plano.
La curvatura del monitor se define por un valor de radio, por ejemplo 800R. Si imaginas un círculo completo de monitores y mides el radio desde el punto medio de dicho círculo hasta el borde del monitor, medirás 800 milímetros. Existen monitores con una curva más pronunciada o más suave. Cuanto mayor sea el número, mayor será el valor R, más suave será la curva.
Dependiendo del tamaño del monitor en sí, una curvatura puede ser una gran manera de situarse más en el juego, basta con pensar en un juego de carreras donde la percepción de la velocidad se sentirá muy diferente que si se juega en un monitor de pantalla plana. Por eso, los monitores curvos suelen tener un tamaño superior a 30 pulgadas y una relación de aspecto de 21:9 o incluso mayor. Existen pantallas más pequeñas con curvatura, pero con un efecto de inmersión mucho menor.
Hay muchas opciones disponibles con diferentes valores de curvatura y debes tener en cuenta los tipos de juegos a los que juegas, ya que no todos se ejecutan mejor con un monitor curvo. Si bien es estupendo para juegos de carreras, combate y simulación de vuelo, así como para juegos fps, puede resultar molesto para juegos de deportes cuando las líneas normalmente rectas del terreno de juego ahora son curvas. En cuanto a la productividad, un monitor con una curva considerable, como el 800R, también puede resultar desagradable de usar. Por eso, para esas tareas, conviene una curva mucho más suave, como 1800R, o incluso una superficie completamente plana.
Entonces, ¿por qué no tener lo mejor de ambos mundos con un monitor que se dobla? Esto es exactamente lo que nos preguntamos en CORSAIR y así nació el XENEON FLEX. Simplemente elija usted mismo la curvatura, desde completamente plana y hasta un radio de curva pronunciado de 800R. Curva suave, ¡no hay problema! Totalmente plana, ¡absolutamente!
Acabamos de enterarnos de que un monitor curvo puede ser estupendo para distintas aplicaciones. El mayor problema de un monitor curvo de 30 pulgadas o más es el espacio que ocupa en el escritorio. Si te dedicas a los juegos de competición o quieres un monitor de menor tamaño en general con una resolución QHD (2560 x 1440 píxeles) para exprimir al máximo los fotogramas de tu tarjeta gráfica, es muy probable que acabes considerando un monitor panorámico (16:9) con un tamaño de pantalla de 27 o 32 pulgadas.
Para estos tamaños de pantalla, recomendamos optar por la pantalla plana y elegir el XENEON 27QHD240 OLED o el XENEON 32QHD240. Ambos monitores ofrecen un rendimiento excelente y son compatibles con AMD FreeSync Premium y NVIDIA G-Sync. Además, todos nuestros monitores son ideales para las necesidades de productividad y ofrecen una gran precisión del color.
Antes de elegir un monitor, debes tener en cuenta el espacio disponible en tu escritorio, las especificaciones de tu PC (para asegurarte de que funciona bien con la resolución y la frecuencia de refresco del monitor) y si quieres utilizarlo sobre todo para jugar o para productividad. Si quieres optar por la curva, debes tener en cuenta la curvatura del monitor o simplemente elegir uno que haga ambas cosas. Si tienes poco espacio, pero buscas la mejor experiencia posible, elige una pantalla más pequeña pero plana. Nuestra gama de monitores le cubre todas las eventualidades.
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