Las unidades M.2 son conocidas por su velocidad superior, tamaño compacto y facilidad de instalación. También ofrecen grandes capacidades de almacenamiento, con unidades más recientes disponibles de 4 TB y más; por ejemplo, ya está disponible la MP600 PRO LPX de 8 TB.
Hay que tener en cuenta que estas unidades son sensibles al calor y el sobrecalentamiento puede reducir su rendimiento. Cada generación de SSD aumenta la velocidad de procesamiento y la capacidad de estas pequeñas unidades y, a medida que las unidades aumentan su rendimiento, el controlador y otros componentes tienen que trabajar más para mantener el ritmo. El mayor reto al que nos enfrentamos cuando buscamos una tecnología más rápida y mejor es mantener la eficiencia para que las SSD no se sobrecalienten.
Así que, a medida que seguimos evolucionando las SSD para hacerlas más rápidas y eficientes, la gestión del calor es un factor cada vez más importante.
Una solución obvia en este caso es utilizar un disipador térmico para mantener fría la SSD. Desde que el factor de forma M.2 para SSD se ha hecho tan popular, muchos fabricantes de placas base han incluido disipadores para SSD. El único problema de muchos de esos disipadores es que a veces no están diseñados adecuadamente para soportar el calor generado por las nuevas unidades M.2 SSD. Por eso, los fabricantes de SSD han empezado a ofrecer unidades con disipadores y ventiladores de refrigeración. Estas soluciones de refrigeración están diseñadas específicamente para las unidades en cuestión y evitarán que se ralenticen bajo cargas normales.
Ahora que ya sabe que las unidades SSD M.2 deben refrigerarse para que funcionen de forma eficaz y eficiente, hablemos un poco de los disipadores térmicos. Los disipadores térmicos han estado presentes en la industria de una forma u otra prácticamente desde el principio. Un disipador térmico es esencialmente una pieza de metal que hace contacto con un chip y ayuda a repartir el calor sobre un área mayor utilizando un trozo de aleación, o en muchos casos aluminio. Los disipadores (y ventiladores) se utilizan en casi todas las CPU y tarjetas gráficas modernas, así como para ayudar a mantener fríos los VRM, los chips de memoria y una miríada de otros dispositivos. Los disipadores son una forma eficaz de mantener fríos los componentes del PC. Pero, ¿hasta qué punto es suficiente?
Ahora bien, la mayoría de las veces, un disipador térmico es lo suficientemente eficaz para mantener fría la unidad SSD, pero a medida que aumentan las velocidades y las capacidades, se genera más calor. Una de las cosas que ocurre con las SSD M.2 es que puede producirse una ralentización térmica. El estrangulamiento térmico es una tecnología diseñada para proteger las SSD de la mala retención de datos provocada por el sobrecalentamiento y, cuando el mecanismo de estrangulamiento térmico entra en acción, reduce el rendimiento de la SSD para evitar que se vea afectada. Para evitar el estrangulamiento térmico en las nuevas unidades más rápidas, se utiliza un ventilador junto con el disipador térmico. Estoy seguro de que todo el mundo está familiarizado con los ventiladores y lo que hacen, pero básicamente cuando se acompaña con un disipador de calor, el ventilador simplemente enfría el calor extraído por el metal. Esta es probablemente una de las mejores soluciones, además de una opción de refrigeración por agua para enfriar la M.2.
Entonces, ¿cuáles son algunos de los retos con los ventiladores? Un posible problema aquí es que los ventiladores producen ruido, y nadie quiere un PC ruidoso. Tenga la seguridad de que el ventilador CORSAIR MP700 PRO es silencioso. En las pruebas, no sólo ha demostrado ser eficaz para evitar que la unidad se ralentice, sino que también es silencioso. Lo suficientemente silencioso como para que sea difícil distinguirlo de los demás componentes de un PC de juegos normal.
Si está buscando una nueva unidad SSD M.2, merece la pena tener en cuenta la nueva CORSAIR MP700 PRO. Puede encontrar la unidad CORSAIR MP700 PRO con refrigerador por aire en configuraciones de 1 TB y 2 TB disponibles en el momento del lanzamiento, mientras que la opción de 4 TB estará disponible en un futuro próximo. La unidad también está disponible sin refrigeración adicional o con un bloque de agua Hydro X Series para su integración en un circuito de refrigeración personalizado.
Estas son las referencias disponibles actualmente:
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