HOW TO

Cómo detener la ejecución de programas de inicio en Windows

  Esta página ha sido traducida automáticamente por DeepL. Switch to English

¿Alguna vez has arrancado tu PC o portátil y te han aparecido un montón de aplicaciones aleatorias que ralentizan el proceso de inicio del sistema? Si te ha pasado, te encuentras con lo que se conoce como programas de inicio o aplicaciones de inicio. Se trata de aplicaciones que se inician automáticamente cada vez que arrancas Windows. Sin embargo, existe una forma de evitar que estas aplicaciones se inicien con Windows, lo que puede ayudar a acelerar el tiempo de arranque del sistema y garantizar que sólo se abran las aplicaciones esenciales al iniciar el equipo.

Este artículo describirá tres tutoriales paso a paso para ayudarle a detener las aplicaciones de inicio en Windows.

Cómo detener los programas de inicio a través de la Configuración de Windows

Paso 1: Accede al menú de configuración de Windows y selecciona la pestaña de aplicaciones.

windows settings menu

Paso 2: Seleccione la pestaña de inicio

windows apps menu

Paso 3: Activar o desactivar las aplicaciones que desea abrir o no al iniciar Windows

Screenshot 2024-07-23 103419

Cómo detener los programas de inicio a través de MSConfig

Paso 1: Pulse Win + R para abrir la ventana EJECUTAR

Picture4

Paso 2: Escriba msconfig, en el cuadro de texto

Picture5

Paso 3: Vaya a la pestaña de inicio y haga clic en abrir el Administrador de tareas

Picture6

Paso 4: Haga clic en cualquier aplicación y activar o desactivar los programas deseados

Picture7

Cómo detener los programas de inicio a través del Administrador de tareas

Paso 1: Abra el Administrador de tareas y vaya a la pestaña de aplicaciones de inicio.

task manager startup apps

Paso 2: Seleccione la aplicación deseada y, en la esquina superior derecha, active o desactive la aplicación.

Ahí lo tienes. Utilizando uno de estos tres tutoriales, puedes asegurarte de que tu ordenador se inicie más rápido y funcione sin problemas, dándote más tiempo para centrarte en lo que más importa.

Reducir el número de aplicaciones de inicio en Windows durante el arranque puede suponer un aumento notable de la velocidad de arranque, lo que le permitirá empezar a utilizar el ordenador de forma más eficiente. Esta optimización también mejora el rendimiento general del sistema, ya que menos programas ocupan recursos, lo que se traduce en un funcionamiento más fluido y una menor actividad en segundo plano. Como resultado, el sistema responde mejor y es más fácil gestionar las aplicaciones activas con una bandeja del sistema más limpia.

CONTENIDO RELACIONADO